¡Que Dios Te Bendiga! No les parece interesante como la mayoría de veces nosotros mismos nos delatamos cuando estamos haciendo algo erróneo? Cuando nos vemos confrontados con estas situaciones, usualmente comenzamos a sudar o hacemos cierta clase de gestos o miradas que nos delatan inmediatamente. En muchas ocasiones ni siquiera nos tienen que confrontar para que comencemos a actuar de esta manera, sino que simplemente nuestra propia conciencia nos delata. El versículo de hoy nos habla precisamente de esto y nos explica como, el impío comienza a huir aun cuando nadie lo persigue y por lo contrario, el justo es audaz y valiente aún cuando esta siendo atacado. ¿Por qué será que el justo es audaz? Mi otra preguntaría seria más bien, ¿por qué no ha de serlo? Si no estamos haciendo cosas indebidas entonces no hay razón para que la culpabilidad nos abrume. Ahora, no quiero que me mal entiendan, la Gracia de Dios sí perdona nuestro pasado, pero no podemos trata de usar esta "Gracia" para tratar de cubrir nuestros pecados cuando sabemos que esta mal y seguimos haciéndolo.¡ha llegado el tiempo de reaccionar y cambiar!  Pastor Joell A. Perez

 Proverbios 28:1 "El impío huye sin que nadie lo persiga, mas los justos están confiados como un león."