¿Alguna vez has tenido una discusión con alguien sobre algún tema sencillo pero a medida que discutían el volumen iba escalando y el lenguaje corporal iba empeorando drásticamente? Las cosas fueron de una simple discusión a una pelea fuerte donde tal vez ¿llegaron a los puños? ¿Fuiste tú el que agredió o el agredido? No importa cual lado de la pelea hayas tenido lo que importa hoy en día es que hayamos reflexionado sobre nuestra actitud y reacción y ahora tengamos otra perspectiva para el futuro. ¿Por qué es esto importante? Uno de los requisitos más importantes como cristianos es crecer en nuestra sabiduría. Si solo pretendemos tenerla, el progreso a nuestras metas será muy lente y hasta doloroso. ¿Quieres ganar una pelea? No grites, más bien calma tu ira. No reacciones agresivamente, más bien reacciona pacíficamente, esto es señal de sabiduría y un gran paso en la dirección correcta hacia la prosperidad.

Tomando las cosas con calma,

Pastor Joell

Proverbios 29:11 “El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla.”