Dios te Bendiga,

¿No les parece hermoso ver como las aves vuelan y van de lado y lado sin ninguna preocupación? Estas vuelan con libertad y van donde quieran. Aunque podemos analizar esto como tener una liberta total, este no viene sin un precio. ¿Cuál precio? Cada una de estas aves pasa por un profundo entrenamiento, este empieza desde su nacimiento. Sus alas van creciendo y llega el día en que su madre los acerca a la orilla del abismo y simplemente los empuja afuera de su nido. En este justo momento pueden suceder dos cosas: el ave se cae de su nido y comienza a aletear hasta que encuentra el balance entre sus alas y el viento y comienza a volar o, simplemente se cae de su nido y cae directamente a su último suspiro. ¿No les parece interesante? Hay muchos de nosotros que nos encontramos en esa orilla, afuera del nido y la pregunta que les quiero hacer en este día es: ¿aprenderemos a volar sobre las circunstancias o caeremos a nuestra destrucción? Nosotros los cristianos no fuimos diseñados para la derrota. Llegó el tiempo de remontarnos sobre todo lo que estamos enfrentando y volar… ¡fuimos diseñados para triunfar!

Tomando vuelo…

Pastor Joell