¡Que Dios Te Bendiga!
A medida que te vas despertando en esta mañana, quiero que medites en ¿quién es tu Salvador? La respuesta inmediata para la mayoría es: Jesús…pero aún hay muchos que lo dudan o tienen confusión sobre esto. ¿Por qué les pregunto esto en este día? Muchos de nosotros vivimos esta vida permitiendo que los juicios de otros y sus palabras nos afecten demasiado. La verdad es que, ¿qué importa lo que ellos digan o piensen? ¡Ellos no te pueden salvar! Claro que se la pasan mirando tus páginas en las redes sociales, lo más seguro es que organicen el club en contra de “______ (tu nombre)” pero al final, sus opiniones, palabras o acciones no tienen nada que ver con tu destino final (al no ser que tú se lo permitas). ¿Por qué les hablo de esto hoy? Tenemos que olvidarnos de todo el drama que sucede a nuestro alrededor y comenzar a caminar hacia nuestras bendiciones; no lograremos hacer esto si permitimos que las acciones negativas de los demás hacia nosotros nos afecten. Tenemos que aprender a ignorar las voces negativas y solo escuchar la voz de Dios. El versículo de hoy les habla a aquellos que les gusta juzgar y les recuerda que ellos no son nadie para estar juzgando y por esta razón, no tenemos por qué darles atención.
¡Llegó el tiempo de callar las voces que no vienen de Dios!
Pastor Joell A. Perez
Santiago 4:12 “La ley la ha dado Uno solo, el cual tiene poder para salvar y destruir. Pero tú, ¿quién eres para juzgar a tu prójimo?”