Que Dios Te Bendiga!
¿Alguna vez has sembrado una semilla? Si lo has hecho, lo más seguro es que puedes recordar es que clase de semilla era, ¿verdad? Ahora permíteme hacerte una pregunta, ¿cuándo sembraste tu semilla (supongamos que era una semilla de naranja), esperabas que naciera un manzano ¿O tal vez un árbol de pera? (claro que no!) ¿Por qué no? Lo normal es que esperamos cosechar de la semilla que sembramos, ¿y no sera el mismo resultado tambien en lo emocional y espiritual? El versículo de hoy nos habla de cómo no podemos esperar cosechar de un fruto el cual no sembramos, seria absurdo esperar otro resultado. No podemos esperar cosechar gozo si solamente sembramos tristeza, y no podemos esperar cosechar prosperidad si solo estamos sembrando pereza. ¿Qué estamos sembrando en este día? El punto de este corto mensaje hoy es que tomemos conciencia y hagamos los ajustes necesarios para realmente sembrar lo que queremos cosechar. ¿Quieres saber algo interesante? Algunas semillas no crecen en ciertas regiones, ¿será que estamos sembrando nuestras semillas en los lugares equivocados? Estas son cosas que debemos analizar muy bien. Lo que no debemos olvidar es que con la ayuda de Dios, aún estamos a tiempo de replantar nuestras semillas para obtener el fruto deseado.
Pastor Joell A. Perez
Gálatas 6:7-8 "No os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará. Porque el que siembra para su propia carne, de la carne segará corrupción, pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna."